No te pierdas nuestro ritual de
Luna llena en tiempos de Tauro que se realizará
el 22 de abril a las 20:00
hrs en Syncronía.
Rafael Cañas 16 Of. D.
Providencia
Entre
la 1 y la 2 de la mañana del 22 de abril ocurrirá el momento preciso de la Luna
Llena para Chile mientras el Sol transita por la constelación de Tauro. La Luna
está entrando en la constelación de Escorpio, en el Medio Cielo y activada por
una especial relación con Neptuno, el planeta que representa al océano. Tiempo
emocional y tal vez de confusiones.
Cuando
la Luna, cuerpo celeste misterioso y de energías escondidas, profundamente
emocional, acuático, se mueve por Escorpio, potencia las aguas, esta vez
subterráneas, calientes, activas, y el mundo oculto. Todo pasa en esas
dimensiones.
Es
posible que en Tauro sintamos la fuerza de energías encontradas que se mueven
en sentido distinto. Por un lado una fuerza para vivir más intensamente en lo
sensorial, aprendiendo lo nuevo y compartiendo con otros un proceso importante;
por otro, una energía liberadora, una gran fuerza para buscar la trascendencia
espiritual. Una potente energía para unirnos físicamente con otra persona, como
también una enorme energía para trascender.
Dependerá
de cada uno hacer la elección en base a nuestro albedrío.
Tauro
está en la casa 3 y Escorpio en la 9. Es la danza cósmica del aprendizaje y la
trascendencia.
Júpiter
en la casa 7 opuesto a Neptuno en la casa 1.
TAURO
dice: Yo soy la tradición, soy el heredero de mi historia. Soy la tradición de
mi familia. Yo tengo la paciencia de la naturaleza.
Es el
primer signo del elemento Tierra. De los cuatro elementos constitutivos del
Todo, la Tierra representa el planeta mismo, lo estable, lo que permanece, lo
sólido. En la Tierra se puso la semilla y debe acogerla en su seno y hacerla
germinar.
La
Tierra es el lugar de la reunión, el punto de encuentro de las personas y la
naturaleza, es el material con el que Dios hizo al hombre. La Tierra es la
arcilla que sirve para nuestros instrumentos, lo sólido, detiene la luz, pero
da respaldo y sustento.
El
Toro es su animal totémico. Quien se observe se reconocerá en su accionar.
Camina lento, pausado, observa todo antes de lanzarse. Es fuerte, sólido, duro.
En él se concentra la semilla de la naturaleza. Por eso es llamado El
Gran Semental.
Con
sus energías y disposición, rige la seguridad. Acumula y cuida las cosas.
Parece pasivo y paciente, porque tienes la capacidad de esperar, de mantenerse atento,
no reflejando apuro alguno. Aunque lo tenga. Sabe que el tiempo habrá de
transcurrir y la semilla puesta en la tierra dará sus frutos. El año dura lo
que dura un año y nada menos y nada más.
Perseverante,
no se da por vencido jamás, a riesgo de ser obsesivo, si acaso lo que quiere
demora en llegar o le resulta difícil de conseguir. Nunca abandona un proyecto,
hasta lograrlo.
No se
da por vencido.
Tauro
está enraizado en la tierra, es de la tierra, es la tierra misma que permanece
sin movimiento, en medio de los cambios, dejando que los procesos avancen en el
silencio y la quietud.
Rige
las sensaciones físicas, despierta los sentidos. Con Tauro, podemos captar los
olores, percibir las temperaturas, experimentar las texturas y gozar los
sabores. Toda la sensualidad instalada en ti, los placeres sensibles y
generosos, volcados sobre tu piel como nutrición de tu esperanza.
Es la
naturaleza, fértil verde, fértil tierra. Es la expresión de la riqueza natural,
de la voluptuosidad de los recursos, la carnosidad de los frutos y la calidez
del sol que cae sobre la tierra selvática humedecida. Es la tierra húmeda.
Todo
lo concreto es un estímulo que se transforma en sensación y adquiere sentido
desde la experiencia viva. Es todo lo concreto en un solo acto y goza con
perfumes, luces, tejidos y materiales, sonidos, músicas, temperaturas, brillos,
colores, paisajes, el canto de los pájaros, el olor de la hierba húmeda y los
efluvios nacidos del cuerpo del ser amado.
Tauro
es esencia de energía femenina. Es la energía receptiva: la tierra que recibe
en su seno la semilla y la hace crecer en su oscuridad. La fertilidad de lo
profundo, lo sutil, lo escondido. El erotismo del tacto, del cuerpo, de las
manos. De la piel. Huele a madera añosa y a libros antiguos. Saborea y
degusta. Los sabores de Tauro quedan en el paladar.
La
trampa de Tauro es que a medida que acumula y atesora, se va identificando con
lo que tiene. Termina manejando tu seguridad a través de ello. Y confunde la
seguridad con los bienes materiales que posee. Su seguridad está dentro de sí
mismo, no en lo que posee. De lo contrario pierde autonomía y se desconecta de
su verdad.
Meditación
en Luna Llena de tiempos de Tauro Hoy la Luna se nos presenta en todo el
esplendor de su redondez y su capacidad de reflejar la luz. El Sol está al otro
lado, en exacta oposición, ofreciéndole generosamente sus energías y rogándole
para que cumpla la tarea de iluminar.
Es el
momento de meditar sobre lo que habrás de hacer con la energía que se
manifiesta en toda su plenitud.
Con la
Luna Llena en Tauro, nos preparamos para el acto de celebración de la victoria
de la tierra sobre la tierra.
Haya
dolor o alegría en tu cuerpo, sabes que ha llegado la hora de la victoria
interior y de la expresión de la energía fundadora. Digamos:
“La
luna se alza en su esplendor. Lejos está el que debe iluminar, pues ha partido
a otras tierras.
Seré
yo, la raíz, la planta, el tallo, las hojas y las frutas de la noche, quien
asuma la mágica tarea.
La
Luna, que se ofrece generosa, me ayudará a iluminar lo oscuro de mi vida.
En
esta hora de éxtasis, de sombras y luminosidad especial, camino hacia el
interior de mí.
Esta
noche es el instante para el encuentro con la energía primordial de la tierra,
la que
permanece
cuando todo se va, la que nunca deja de estar para darme sus bendiciones.
Percibo
las sombras y el silencio, para dejar surgir las fuerzas elementales que brotan
desde el
corazón.
Esta
es la fiesta de la naturaleza. Te invoco, madre Tierra, Palpo tu textura y los
frutos de tu generosidad llegan a mi cuerpo. Yo estoy en ti y tú en mí.
Yo soy
desde el origen y regreso al origen: Dijiste, polvo eres y en polvo te habrás
de convertir.
Contacto
con la Memoria Natural. Te pido seguridad y trabajo, Estabilidad para mí
y para todos, tranquilidad para toda la humanidad.
Que la
Madre Tierra purifique nuestras labores. El Buen Dios se ha encarnado: Acepta
las limitaciones de la tierra, para expandirlas en alegría y solidez.
Ante
mis temores, seguridad; ante mis angustias, serenidad; ante mi soberbia,
prudencia.
Que el
Ungido de Dios oriente y purifique mis acciones y así refleje los impulsos de
Unidad y de trascendencia. La Tierra entrega generosa sus frutos y sus
energías, necesarios para dar base la próxima tarea.”
Hemos
recibido el testimonio. Debemos cuidarlo, respetarlo. La seguridad, la solidez,
la paciencia, la resistencia, son los recursos más preciados. Confiemos en los
recursos recibidos.
Jamás
se nos pedirá nada que no estemos en condiciones de dar. Avancemos hacia la
profunda felicidad, desde la tierra en la que estamos instalados.
JAIME HALES